Por la Comisión de Industria y Energía de TECNIBERIA
El suelo industrial debería ser tratado como una eficaz herramienta de generación de “empleo de calidad”. La falta de acierto en la localización de suelo industrial ha dado lugar a que con cierta frecuencia se tenga que recalificar este suelo para otros usos, mientras que, si hubiera existido un planeamiento basado en estudios más acordes con la realidad económica y social serían, la herramienta tractora que necesitamos.
La falta de acierto en su localización o en ocasiones, la improvisación, ha hecho que muchos de estos parques o suelos industriales estén vacíos y no resulten atractivos para las empresas, lo que implica un nulo retorno de la inversión pública en diseño, construcción y mantenimiento. Esto supone que a día de hoy para muchas de estas superficies se esté considerando su recalificación para otros usos. Varias ciudades de nuestro país cuentan con un muy considerable número de parcelas de propiedad municipal calificadas con uso industrial sin que hayan podido ser comercializadas. Habría que preguntarse por qué estas parcelas son “suelos improductivos” y a continuación buscar la fórmula para que no sea tan oneroso para las empresas poder disponer de ese suelo necesario para su desarrollo.
No deberíamos de olvidar que el desarrollo de este tipo de suelo tiene un componente estratégico para los organismos locales y para la sociedad en general, pues la creación de empleo, a través de este tipo de inversiones, debería ser uno de los factores más importantes a tener en cuenta cuando se desarrolla suelo industrial. La ejecución, desarrollo y puesta en marcha de actividades industriales en dichas superficies serían de vital importancia en el momento actual y supondrían un motor, no solo para aquellas actividades derivadas de la propia construcción, sino de empleo a más largo plazo para el desarrollo de la propia actividad.
La flexibilidad y rapidez de respuesta de las administraciones, siendo capaces de detectar las necesidades de las empresas se hace cada vez más necesaria, ya que la nueva economía no permite descuidos en este sentido y véase el ejemplo de Portugal, que ha sabido aunar unos requisitos básicos para el correcto desarrollo de las industrias.
Las administraciones tienen que ser capaces de dimensionar y habilitar el suelo industrial existente y adaptarlo a las necesidades actuales. Las empresas que han apostado por el crecimiento en el negocio online se están enfrentando a serias dificultades para disponer de superficie industrial para uso logístico. Por ello este tipo de suelo industrial para usos logísticos constituye una de las necesidades vitales que están afontando empresas que han acertado con su estrategia de negocio y crecimiento, pero que se encuentran con la imposibilidad de aumentar su espacio debido a unas estructuras administrativas que no han acertado con la forma de tomar el tren de la nueva economía.
Además, podría ser adecuado contar con procedimientos ágiles para la recalificación de terrenos o agrupación de suelo industrial en polígonos, para poder atender estas necesidades, ayudando a empresas, que han demostrado ya su capacidad de crecimiento, a mantener unidas sus instalaciones, lo que les permitirá mejorar su competitividad en vez de verse obligados a tener sus naves diseminadas en el territorio para poder contar con la superficie que necesitan para su correcto funcionamiento.
Agilidad por parte de las administraciones, detección de las nuevas necesidades con anticipación , evitando la especulación en el suelo industrial de desarrollo público y suelo a coste cero a cambio de creación de empleo, son algunas de las herramientas que se podrían utilizar, en un entorno de total transparencia e igualdad de oportunidades, para apoyar a nuestra industria, que es una fuente de empleo estable y de calidad.